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Coupe Icare

es el festival y feria de vuelo más importante del mundo.
El equipo de Icaro estará allí del 18 al 22 de septiembre en St Hilaire (Francia).
Le invitamos a visitar nuestro stand, donde presentaremos nuestros nuevos y futuros productos.

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Cascos deportivos

En la mayoría de los países, es obligatorio llevar un casco homologado para las actividades deportivas en las que exista un riesgo potencial de impacto en la cabeza. Cada casco debe llevar en su interior una etiqueta que especifique las normas para las que ha sido probado. Todos los cascos Icaro están diseñados y fabricados para ser lo más ligeros posible, optimizando al mismo tiempo la protección de la cabeza. Han sido probados por una empresa de certificación autorizada por el Ministerio de Transportes italiano y reconocida por la autoridad alemana TUV.

Protección deportiva para la cabeza

El casco protege la cabeza de los impactos reduciendo su velocidad de desaceleración. Esto se consigue absorbiendo la energía cinética. En el caso de golpes muy leves, la capa de acolchado interior hace el trabajo. En el caso de impactos mayores, la desaceleración se reduce mediante la deformación permanente de la carcasa interior, fabricada en poliestireno expandido. Cuando la cantidad de energía que hay que absorber es mucho mayor, como en un impacto violento, la única forma de ofrecer protección es mediante la rotura controlada de la calota exterior rígida. Por lo tanto, una calota de casco demasiado robusta no ofrecerá necesariamente la mejor protección para la cabeza y, por el contrario, puede empeorar la situación al aumentar la velocidad de deceleración por el efecto rebote.
El principio de rotura controlada determina el material y el grosor óptimos de la calota para que, en caso de impacto violento, ésta se deforme permanentemente absorbiendo la máxima cantidad de energía cinética. Es la rotura progresiva de la calota exterior del casco la que absorbe el choque e impide su transmisión a la cabeza. Por esta razón, aunque pueda parecer contrario a la intuición, un casco debe manipularse con sumo cuidado. Durante su almacenamiento, no debe exponerse a cargas elevadas.
Además, un casco deportivo debe ser ligero, ya que un casco pesado empeora el riesgo de lesión cervical en caso de impacto debido al aumento de la inercia. Todos los cascos Icaro están cuidadosamente diseñados para optimizar su seguridad.